Hotel Casita Amarilla, Barcelona

El hotel tiene una ubicación bastante buena, aunque está un poco alejado del centro de Barcelona. Las habitaciones son modernas y acogedoras, y el personal fue muy amable. Sin embargo, el checkout era un poco temprano, lo cual fue un inconveniente. En general, fue una buena experiencia, considerando el valor por el precio que pagamos.

El hotel está en una ubicación tranquila, lo cual es perfecto para relajarse, y las habitaciones son modernas y limpias. Además, el servicio fue muy útil a pesar de la barrera del idioma. Sin embargo, la lejanía del centro de Barcelona puede ser un inconveniente para algunos, y el horario de check-out es bastante temprano, a las 10:00 AM.

El hotel está bien ubicado, accesible a varias paradas de metro y tiene un entorno tranquilo. Las habitaciones son limpias y amplias, aunque la falta de un aire libre y el fuerte olor a cigarrillos no son lo ideal. El servicio fue amable, pero el horario de check-out a las 10:00 AM fue un poco temprano. En general, es una opción decente para una noche, aunque no es perfecta.

El hotel tiene una buena ubicación, aunque está un poco alejado del centro de Barcelona. Las habitaciones son limpias y cómodas, pero había un olor a cigarrillo que no fue agradable. El servicio fue un poco complicado debido a la barrera del idioma, aunque el personal hizo lo mejor que pudo. En general, creo que el valor por lo que pagas es aceptable, pero hay aspectos que podrían mejorar.

El hotel tiene una ubicación excelente, bastante tranquila y cerca de la estación de metro, lo que fue ideal para nuestras necesidades. Las habitaciones son limpias y amplias, pero la experiencia de servicio no fue la mejor, ya que el horario de salida fue un poco temprano. En general, ofrece una buena relación calidad-precio, aunque el ruido en el vestíbulo por la mañana podría ser un inconveniente.

El hotel está en una ubicación interesante, algo alejada del centro de Barcelona, pero bastante tranquila y accesible. Las habitaciones estaban limpias y eran agradables, aunque un poco frías incluso con la calefacción al máximo. El servicio fue amable, aunque había que lidiar con el idioma. En general, tiene sus pros y contras, pero considero que puede ser una opción razonable si buscas algo alejado del bullicio del centro.

El hotel tiene una ubicación bastante buena, cerca de Park Güell y a un corto paseo de una estación de metro. Las habitaciones son modernas y muy limpias, aunque había un olor fuerte a cigarrillos que resultaba incómodo. El servicio fue amable, aunque la barrera del idioma fue un pequeño inconveniente. En general, el precio es razonable considerando la calidad, pero el problema del olor en las habitaciones es algo que deberían resolver.

El hotel tiene una buena ubicación, bastante cerca de una estación de metro y en un lugar tranquilo. Las habitaciones son espaciosas, aunque la calefacción no fue suficiente y pasamos un poco de frío. El personal fue amable, pero a veces un poco ruidoso en el lobby por la mañana. En general, el hotel ofrece una relación calidad-precio aceptable, pero algunos detalles podrían mejorar.

El hotel tiene una ubicación buena y tranquila, cerca del metro y de algunos lugares turísticos. Las habitaciones son modernas y muy limpias, además, recibimos una botella de cava gratis, lo cual fue un bonito detalle. Sin embargo, el servicio podría mejorar un poco en la comunicación, ya que el personal no hablaba inglés. En general, es una opción que ofrece buen valor por el precio.

El hotel está en una ubicación bastante peculiar, ya que es un 'love hotel' como mencionaron otros. Aunque no decepciona en cuanto a lo que uno podría esperar, está lejos del centro de Barcelona. Las habitaciones, sin embargo, no fueron lo que esperaba, con un fuerte olor a cigarrillo y con frío, a pesar de tener la calefacción al máximo. El servicio, a pesar de ser muy amigable, tenía algunos problemas como el ruido en el vestíbulo desde temprano. En general, podría mejorar en varios aspectos.